Es la forma mediante la cual iOS se “asegura” que la persona que está utilizando el dispositivo sea el usuario autorizado, y posiblemente no sea otro que la persona que lo configuró por primera vez y que, por tanto, se caracteriza por ser el dueño del mismo.

Introducir varias veces nuestro código de desbloqueo al iPhone de forma incorrecta, cuando creemos que es el correcto, puede acabar convirtiéndose en una experiencia verdaderamente frustrante. Especialmente cuando introducimos una contraseña pensando que es la correcta y, sin embargo, nada funciona.

Peor aún, después de un número determinado de intentos fallidos, aparecerá un mensaje en la pantalla de nuestro teléfono móvil que nos informará que el iPhone ha sido desactivado. En ese momento, el dispositivo quedará deshabilitado y la única forma de volver a usarlo es conectándolo a iTunes o borrar su contenido a través de iCloud. Por tanto, ¿qué podemos hacer cuando no recordamos la contraseña (o el código de desbloqueo) del dispositivo?